CLUB SENDERISTA DE FUENLABRADA

Se trata de una Asociación Deportiva fundada en julio de 2010 y adscrita a la Federación Madrileña de Montañismo y la Federación Española de Deportes de Montaña y Escalada, que entre sus fines contempla la práctica deportiva de deportes de aire libre, especialmente el senderismo, montañismo, el esquí y la bicicleta de montaña, a través de actividades que fomenten la amistad, el compañerismo y la camaradería entre sus socios.
Además son objeto de nuestro club la promoción de actividades sociales y culturales para dar a conocer y divulgar el senderismo y el montañismo, así como la defensa del Medio Ambiente natural y urbano, la promoción y cuidado de la naturaleza, la biodiversidad y la actividad sostenible.
La sede social del Club es en Loranca Fuenlabrada (Madrid), calle Concepción Arenal, 1, pero esta dirección no es utilizada y en la práctica carecemos de sede social estable, él es CIF: G-85968527, y el número de registro de entidad en la Comunidad de Madrid es el 5.792, y el número de inscripción en la Federación Madrileña de Montañismo es 389.
Estimados amigos, bienvenidos a la página web del Club Senderista de Fuenlabrada, a través de estas líneas queremos informaros de quienes somos y lo que hacemos, así como intentar facilitaros la práctica del deporte del senderismo y el montañismo, si estáis interesados en ello.
Nuestros socios se dedican a la práctica deportiva del Senderismo y el Montañismo, con carácter no competitivo, es decir de forma tranquila y relajada, pero alternando el grado de dificultar de las marchas y salidas, de forma que podamos dar respuesta a las aspiraciones de todos, según su forma física y sus deseos y pretendemos alcanzar con las actividades cualquier región o zona montañosa de España.
Para acceder a nuestro Club como socio, solo es preciso rellenar una ficha con los datos personales solicitando el ingreso, abonar la cuota (10 € para federados y 20 € no federados), y así se adquiere la condición de socio y el derecho a participar en las actividades y actos sociales, debiendo además seguir estrictamente los consejos y recomendaciones para una práctica deportiva segura y sin riesgos, respetando el medio ambiente natural y urbano.
Por ello os invitamos a participar con nosotros de la práctica saludable del senderismo y el montañismo, haciendo amigos, y conociendo otras personas y lugares

RECOMENDACIONES Y CONSEJOS PARA LA REALIZACION DE UNA BUENA MARCHA

  • La organización llevará un pequeño botiquín.

  • Generalmente el agua de montaña es apta para consumo, pero siempre que esté clara y el río o arroyo corra en caída y no haya ganado suelto en las inmediaciones, especialmente en el curso superior a nuestra presencia.

  •   Comida e hidratación. Cada participante deberá llevar agua o bebidas isotónicas, en la cantidad necesaria según las características del recorrido y la época del año, para evitar la deshidratación, así como algo de comida calórica, azúcares, chocolates, frutos secos.

  •  Los despistes.- Los despistes pueden producirse por falta de atención y/o mal tiempo. Se marchará en grupo compacto si es posible, y en caso de algún despiste o extravío se utilizará el silbato de montaña, y en todo caso habrá de descenderse no subir nunca por ladera.

  •  El paso de marcha.- El ritmo de paso en la montaña es fundamental para disfrutar de la marcha y evitar sufrimientos innecesarios. Procuraremos mantener el mismo ritmo de paso tanto en subidas como en bajadas. Evitaremos los pasos largos pues fatigan mas y suponen un desgaste inútil, adaptaremos el ritmo a la pendiente y tipo de terreno.

  •  Vestimenta necesaria.- En verano la vestimenta será adecuada a las circunstancias, en época de sol, evitar camisetas de tirantes y pantalones cortos, llevar gorra. En invierno se llevará abrigo suficiente, en todo caso chubasquero, gorro, guantes, gafas de sol y cremas protectoras de la piel con un nivel de protección de al menos 30.

  •  Llevar equipo adecuado.- Mochila ligera de no más de 30 l., botas de montaña o trekking, cantimplora, brújula y mapa de la zona, estos dos últimos no serán necesarios si se acompaña de la organización, pero siempre es útil.

  •  Recomendaciones de la organización.- Atender siempre las indicaciones de la organización, conocedora de la zona y del recorrido y no separarse del grupo, informarse previamente de la climatología prevista en la zona y época del año, lo que es fundamental para prever la ropa de abrigo y la ruta a seguir.

  •  Las paradas.- Se realizarán paradas cortas pero frecuentes aprovechando para beber y comer, abrigándose cada vez que se pare. La bebida preferentemente será agua o líquidos isotónicos que prevengan la pérdida de electrolitos y los efectos de la deshidratación por el calor, los ritmos de parada acostumbran a ser, al menos, de cinco minutos cada hora de marcha.

  •  Urgencias.- Las más comunes son torceduras o indisposiciones, son más frecuentes de lo que imaginamos, se producen por llevar calzado no adecuado o no comer y beber lo suficiente, las conocidas como “pájaras”, bruscos descensos de azúcar, y se evitan con la ingestión de glucosa.

  • Cuando haya una persona lesionada o accidentada se la abrigará y señalizará adecuadamente, nunca dejarlo solo y avisar a los servicios de urgencias y a la organización.

  •  Otras recomendaciones.- Es muy recomendable llevar bastones de marcha extensibles adaptables de la orografía del terreno, bolsa de basura para desperdicios, linterna pequeña.

Es de suma importancia seguir al pie de la letra estos consejos, ya en algún momento, hacerlo nos puede ahorrar algún susto o disgusto innecesario, ya que si salimos al monte es a disfrutar, no a sufrir.

¿QUE ES EL SENDERISMO?

El senderismo es una actividad deportiva no competitiva que se realiza sobre caminos balizados y homologados por el organismo competente en cada país. Busca acercar a las personas al medio natural y al conocimiento de la zona a través del patrimonio y los elementos etnográficos y culturales tradicionales, utilizando preferentemente el sistema tradicional de vías de comunicación,  tales como cañadas reales, caminos vecinales y senderos.

Constituye una simbiosis entre deportecultura y medio ambiente.

Se trata de una actividad relajante que puede confundirse con otras disciplinas o englobarse dentro de ellas debido a su similitud, tales como el excursionismo, el montañismo o el trekking. Según se desprende de la extensa literatura sobre deportes de montaña y aire libre el excursionismo sería la disciplina más cercana y precursora del senderismo. La diferencia principal con este último sería que discurre por caminos y senderos no balizados y que por lo tanto no cuentan con las garantías de seguridad y calidad que proporcionan los senderos homologados. La duración de rutas en el excursionismo se limita generalmente a un día.

El montañismo se entiende como aquella disciplina deportiva que consiste en ascender a cimas montañosas y que puede llegar a precisar de conocimientos, técnicas y material propios de la escalada y que por lo tanto implica en ocasiones un importante nivel de dificultad que hace que no sea un deporte abierto a la gran mayoría de la población, como ocurre con el senderismo y el excursionismo.

Trek es un anglicismo originado en Sudáfrica y se utiliza para describir la realización de un viaje largo y complicado. Por lo tanto puede definirse al trekking como la modalidad deportiva que consiste en recorrer de forma autónoma, a pie y durante varios días o semanas parajes aislados generalmente con dificultad de tránsito tales como zonas montañosas o lugares remotos sin senderos. Es una palabra que comenzó a usarse en los años ochenta por los alpinistas que viajaban al Himalaya o a los Andes para definir las largas marchas de aproximación a la base de las montañas a las que pensaban ascender.

Dentro del equipamiento, se sugiere: un buen par de botas, ropa cómoda, mochila o bolso para llevar provisiones, agua, gafas de sol, sombreros, bastones. No hay que olvidar la crema protectora. La exposición prolongada al sol, puede producir quemaduras, incluso si el día está nublado.

HISTORIA DEL SENDERISMO

En España, el hecho de señalizar senderos con el fin de facilitar su recorrido se había producido con anterioridad a 1972 en diversas partes de nuestra geografía, pero siempre con carácter local. Pero puede decirse que el senderismo se introdujo en España a través de la llegada en 1972 de un escrito de la Associatión de Tourismo Pèdestre de París a la Federación Española de Montañismo en el que se solicitaba la continuación del itinerario europeo E-4 desde de la frontera en Puigcerdá (Cataluña) hasta la parte meridional de la Península Ibérica 3

Desde ese momento y para dar respuesta a esa iniciativa se constituyó el Comité de Senderismo por iniciativa de los señores Enric Aguadé Sans y Cullel, y al final de dicho año se celebra en León la Asamblea anual de la Federación en la que se aborda dicha propuesta, decidiéndose transmitir el encargo a la Federación Catalana de Montañismo. Al año siguiente, en 1973, se decide adoptar el sistema francés de señalización y tomar la normativa del país vecino para desarrollar un borrador sobre normativa de señalización y aprobar el 1º Plan de Senderos.

Es en 1974 cuando el Sr.Enric Aguadé Sans pinta la primera marca blanca y roja en España, perteneciente al GR-7, que hoy en día se extiende hasta Tarifa y forma parte de dicho itinerario europeo E-4. El Sr. Aguadé fue la persona encargada en aquel entonces de marcar los primeros 222 km de dicho itinerario. Pasaron sólo unos meses para que la topoguía fuera editada. Fueron sin duda estos años, 1972, 1973 y 1974 los que marcaron un hito en la historia del senderismo en España y el Sr. Aguadé el protagonista más destacado.

Fueron los años 70 la niñez del senderismo español, en la que se comienzan a crear las delegaciones regionales de la Federación, y en la que el esfuerzo, la ilusión y el altruismo de los precursores de este deporte en España logran vencer la falta de recursos económicos y de experiencia del momento. Fue sin duda el entorno de los Pirineos (Cataluña, Huesca, Navarra y País Vasco) la zona pionera del momento.

Los años 80 fue la época del contagio del movimiento a las comunidades de Madrid y Valenciana y del desarrollo de los GR, existiendo al final de dicha década unos 8.027 km de senderos marcados y con topoguía publicada. En esta década se produce el fin de la época del Sr. Cullel al mando del senderismo federativo, pasando el testigo al Sr. Domingo Pliego.

Si los 80 fue el momento de los ST, los 90 lo fueron de los senderos PR. Fue la década de la consolidación, generalización y popularización del senderismo como deporte, y la época en la que dicho deporte transcendió del mundo montañero pasando a ser practicado por la población general. En 1996 el País Vasco es la primera comunidad autónoma que mediante Decreto regula la utilización de las señalización de senderos en su territorio. En 1997 se imparte por primera vez en el Puerto de Navacerrada (Madrid-Segovia) el curso de Técnico de Senderos, una titulación que unifica los conocimientos adquiridos a lo largos de más de 20 años de experiencia.

A partir del año 2001 el mundo senderista sigue madurando en España, continúa aumentando el número de senderos señalizados y también el número de usuarios. Comienza a estudiarse la repercusión de esta actividad en las áreas no urbanas y se determina su rentabilidad económica en el «Estudio de impacto socioeconómico y medioambiental del senderismo en la provincia de Huesca».

A día de hoy existe en España una red de más de 60.000 km de senderos señalizados, desigualmente repartidos, y que se concentran en la zona peripirenaica (País Vasco, Navarra, Huesca, Cataluña), costa mediterránea norte (Valencia, Castellón, Tarragona y Barcelona), Cordillera Cantábrica (Asturias, León, Burgos y Cantabria), centro (Madrid y Ávila) y sudeste (Almería y Granada).

En la actualidad la homologación de las rutas en España corresponde a las federaciones territoriales de montaña correspondientes, según sea el sendero, y conforme a la legislación vigente en las comunidades autónomas que la poseen.

Ventajas de practicar el senderismo

Senderismo, excursionismo o trekking son palabras, tal vez no sinónimas, pero sí que expresan un significado parecido. Así, la Federación Española de Montañismo y Escalada (FEDME) define el senderismo como «la actividad deportiva no competitiva, que se realiza sobre caminos balizados, preferentemente tradicionales, ubicados en el medio natural; busca acercar la persona al medio natural (…)», como hemos reseñado al principio de estas líneas.

Está recomendado y es apto para todas las personas, desde los más jóvenes hasta los mayores. Aunque, el estado de forma física de cada uno determinará los itinerarios más o menos dificultosos que se afronten por cada decidido senderista. El grado de dificultad y la distancia que se vaya a superar irán estrechamente relacionados con el aumento de las capacidades y aptitudes de cada individuo. Es por ello que el senderismo tiene como principio básico mejorar las condiciones tanto físicas como psíquicas de sus practicantes. Además, en segundo plano, también aparece la recuperación y el reencuentro de la persona con el medio natural y el propio paisaje, regresando a ciertos aspectos de la vida tradicional.

Beneficios de su práctica

La práctica del senderismo o del excursionismo lleva implícitos una serie de retos y satisfacciones personales. Entre muchas de sus ventajas sobresalen:

  •  Permite un íntimo conocimiento de la naturaleza, lo que se refleja en un mayor respeto por la misma. Se obtiene un mayor acercamiento a las regiones y a las poblaciones por las que se transita, aparte de ampliar el saber sobre la fauna y la flora de cada lugar.

  •  Desarrolla una sana convivencia entre familiares y amigos de cualquier edad, por lo que se incrementa el espíritu de apoyo y compañerismo entre sus aficionados.

  •  Supone un excelente ejercicio cardiovascular.

  • Su práctica se lleva a cabo lejos de la ciudad, por lo que no existe ningún tipo de contaminación urbana.

Recomendaciones básicas

Además de sus ventajas, como se apunta de la Asociación alpinista Penyagolosa de Castellón, a la hora de prepararse para realizar una ruta también conviene tener en cuenta algunos cuantos consejos prácticos para disfrutar en mayor media del entorno natural por el que se desarrolla esta saludable actividad física.

  •  En todo momento hay que mostrar un respeto absoluto a la naturaleza y al propio entorno.

  • La planificación de la excursión resulta fundamental. También es recomendable realizar cálculos aproximados sobre el horario y la duración del itinerario. Hay que tener en cuenta que toda ruta tiene un recorrido de vuelta, por lo que es aconsejable no sobrestimarse y guardar fuerzas.

  • Es recomendable preparar la ruta para disfrutar en mayor media del entorno natural

  • Otro aspecto que no debe pasar desapercibido consiste en recabar información sobre la meteorología. Hay que saber que en la montaña el tiempo es muy variable y puede experimentar cambios bruscos en un corto espacio de tiempo.

  • Disponer del equipo adecuado es un requisito imprescindible. Mientras que en invierno es esencial ir bien abrigado, y vestido por capas para facilitar el quita y pon de la ropa, en verano es muy conveniente llevar protección solar, gafas de sol y una visera o similar para evitar insolaciones. En cualquier época del año nunca está de más llevar alguna prenda impermeable para protegerse de la lluvia y contar con un calzado idóneo para el terreno.

  • Aprovechando los avances tecnológicos, el móvil puede ser un accesorio de gran ayuda y utilidad en momentos puntuales ante situaciones de máximo riesgo. Y también es importante recordar, e incluso tener en memoria, el número de emergencia: 112.

  •  La alimentación es otro punto que hay que considerar. El agua y la comida nunca deben faltar. También es recomendable prestar atención a los manantiales, y sólo fiarse de aquellos que estén señalizados con el letrero de agua potable.

  • Para respetar el entorno y la naturaleza del lugar es realmente necesario llevarse la basura generada para mantener limpio el monte.

SEÑALIZACION

Los diferentes tipos de senderos se encuentran balizados mediante un código de marcas diferente según el tipo de sendero y el país en el que se encuentre. A pesar de tal diversidad de marcas, todas ellas señalizan el recorrido del sendero cumpliendo las directrices establecidas por la European Ramblers Association(ERA).2 Dichas directrices fueron establecidas en la 1º Conferencia Europea en Marcaje de Senderos, organizada por dicho organismo, y celebrada entre el 28 de abril y el 2 de mayo de 2004 en Bechyne (República Checa). Dicho acontecimiento reunió a 24 organismos nacionales de senderismo de 17 países europeos, representando todos ellos a más de 5 millones de senderistas europeos.

En la Declaración de Bechyne se acordaron unas directrices comunes que dotaran de coherencia a la red de senderos europeos, pero no se creó un código común de marcas para todos los países. Los diferentes códigos de señalización existentes en las diferentes partes de Europa hacen que dicho objetivo sea difícil de conseguir y se dictaminó que la imposición de un sistema de marcas común sería un acto perjudicial para el senderismo, debido a las consecuencias que podría acarrear, tales como la creación de costes económicos a las diferentes asociaciones, la pérdida de voluntarios, confusión y la pérdida de la identidad histórica creada por los sistemas tradicionales de marcaje. En su lugar se acordó que la diversidad de sistemas de marcaje no era obstáculo para la movilidad de los senderistas a través de los diferentes territorios siempre que el cambio de sistema de marcaje sea notificado e informado al senderista siempre que éste se produzca.

La Topoguía

Esas rutas suelen editarse en topoguías, y llevan una numeración correspondiente al número de orden registrado en el territorio correspondiente para ese tipo de sendero: Gran Recorrido (GR), Pequeño Recorrido (PR), Sendero Local (SL). La duración puede ser desde una hora hasta varios días.